El Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) informó sobre la presencia de una «pluma de humo» en la atmósfera uruguaya, proveniente de los incendios en Bolivia y Brasil. Este fenómeno generó un velo gris en el cielo y algunos efectos sorprendentes, como un sol opaco y lluvias negras en varias regiones del país. Aunque se espera que la situación mejore a partir del miércoles 11 con el pasaje de un frente frío que cambiará la dirección del viento, el humo podría regresar de manera intermitente mientras los incendios continúen activos.
El fenómeno, causado por las quemas agrícolas habituales en Sudamérica y agravado por las condiciones climáticas, ha sido monitoreado a través de imágenes satelitales que muestran cómo el humo llegó hasta el sur de Uruguay, incluyendo Montevideo. Inumet explicó que la combinación de déficit hídrico, vientos secos y alta radiación contribuyó a la expansión de los incendios y la propagación del humo.
En cuanto a las precipitaciones recientes en el norte del país, Inumet confirmó que las lluvias arrastraron las partículas de humo, provocando que el agua caída se tornara turbia. No se descarta que esta situación vuelva a repetirse en zonas donde se registren nuevas lluvias.