El Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEEd) presentó los resultados de las pruebas Aristas Primaria 2023, que evalúan el desempeño en lectura y matemática de estudiantes de tercero y sexto año de educación primaria en Uruguay. Los datos revelan un cumplimiento parcial de las metas establecidas por la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), con una leve mejoría en tercer año y una caída en sexto.
Resultados en tercer año:
Lectura: El 39,6% de los estudiantes se ubicó en los niveles 1 y 2 (de un máximo de 5), superando la meta de ANEP que aspiraba a un 43% o menos en estos niveles. Sin embargo, casi un 40% de los alumnos presenta desempeños bajos. En escuelas de contexto muy favorable, el porcentaje en niveles bajos fue del 17,6%, mientras que en contextos muy desfavorables alcanzó el 61,1%.
Matemática: El 44,7% de los estudiantes se situó en los niveles 1 y 2, cumpliendo con la meta de ANEP de menos del 46%. En contextos muy favorables, el 18,9% de los alumnos se ubicó en estos niveles bajos, mientras que en contextos muy desfavorables fue del 67,4%.
Resultados en sexto año:
Lectura: El 19,7% de los estudiantes se posicionó en los niveles 1 y 2, por encima de la meta de ANEP que era menos del 18%. Esto indica que una proporción significativa de alumnos tiene dificultades para comprender textos de manera integral.
Matemática: El 37,3% de los estudiantes se encontró en los niveles 1 y 2, superando la meta de ANEP de menos del 31%. En contextos muy desfavorables, el 58,7% de los alumnos se ubicó en estos niveles bajos, mientras que en contextos muy favorables fue del 12,3%.
Estos resultados evidencian una persistente inequidad en el desempeño educativo según el contexto socioeconómico y cultural de los estudiantes. Además, se observa un deterioro en la convivencia escolar, lo que representa un desafío adicional para el sistema educativo uruguayo.
La evaluación Aristas se realiza cada tres años y tiene como objetivo medir los logros educativos en diferentes niveles de enseñanza. La edición 2023 es la primera pospandemia y no contempla los cambios introducidos por la reforma educativa que comenzaron a implementarse en 2024.
Para abordar estas brechas y mejorar la calidad educativa, es fundamental implementar políticas que promuevan la equidad y fortalezcan la convivencia en los centros educativos.