Montevideo, 18 de junio de 2025 – La Cámara de Representantes vivió ayer una verdadera maratón legislativa por la Rendición de Cuentas, con una sesión que arrancó sobre las 10:30 y se prolongó pasada la medianoche, marcada por fuertes cruces entre el oficialismo, la oposición y el voto decisivo de Cabildo Abierto .
El proyecto contiene medidas sensibles: elevar el tope de endeudamiento a US $ 3.450 millones, liberar créditos por US $ 144 millones más IVA para el pago al Grupo Vía Central por el Ferrocarril Central, y destinar $ 2.600 millones a ASSE para facturas acumuladas.
Frente Amplio, Partido Nacional, Colorado e Independiente anunciaron que respaldarían la Rendición en general, pero sólo Cabildo Abierto aseguró los votos clave para aprobar esos artículos específico.
Diputado Álvaro Perrone expresó con contundencia: “Las explicaciones las tienen que dar otros” al referirse a quienes rechazan esos recursos para salud y medicación.
Desde la oposición, se subrayaron los riesgos de incrementar la deuda y gastos extraordinarios. Pablo Abdala (Partido Nacional) insistió en que el aumento “se saltea el marco normativo vigente” y criticó pagos pendientes relacionados con el Ferrocarril Central que calificó como “herencia” del Frente Amplio.
Gabriel Gurméndez (Colorado) señaló que la nueva deuda no está debidamente justificada y que los fondos para ASSE podrían gestionarse con la normativa actual.
Mariano Tucci, del MPP, destacó en la sesión que el país arrastra “el mayor déficit fiscal de los últimos 35 años”, con un crecimiento económico “bajo y volátil”, y señaló que las mejoras en el empleo trajeron aparejado un “deterioro en su calidad”. Sus palabras encendieron un cruce con Adriana Peña (PN), quien defendió la gestión de Lacalle Pou ante la pandemia y acusó al Frente Amplio de “irresponsabilidad”