El Senado votó este martes, con apoyo unánime, el proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo que busca atenuar las consecuencias económicas derivadas de la brecha cambiaria con países vecinos en las zonas limítrofes. La iniciativa combina rebajas fiscales, incentivos laborales y un régimen especial de importaciones, y ahora regresa a la Cámara de Diputados para su sanción definitiva.
Entre las medidas aprobadas se encuentra la reducción a la mitad de la tasa básica del IVA, que quedará en 11 % para compras presenciales con débito en comercios minoristas de ramos generales ubicados a menos de 20 kilómetros de los pasos de frontera. Además, se subsidiará por completo el arrendamiento de terminales POS para monotributistas y pequeñas empresas, con el objetivo de promover el uso de medios de pago electrónicos.
El proyecto también crea un régimen simplificado de importación para minoristas situados hasta 60 kilómetros de la frontera, que podrán traer productos de la canasta básica sin tributos ni paratributos, bajo control del Ministerio de Economía. En materia laboral, se prevé una exoneración de hasta el 75 % en aportes patronales a BPS por nuevos empleos formales generados durante un año en sectores como comercio, industria, turismo y servicios.
Asimismo, se incrementa la bonificación del Imesi a las naftas, que pasará del 24 % al 32 % en pasos con Brasil, y se estudia un descuento del 36 % en pasos con Argentina. La norma incorpora la creación del Observatorio Nacional de Frontera, que relevará y publicará de forma semestral indicadores económicos y de precios en zonas limítrofes, emitiendo alertas y recomendaciones.
Durante su tratamiento en el Senado, el Frente Amplio revirtió modificaciones introducidas por Diputados, ratificando los límites territoriales para acceder a los beneficios e incorporando una integración ampliada para el Observatorio. Con amplio respaldo político, se espera que la sanción final en Diputados sea un trámite sin mayores obstáculos.