El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil determinó este martes que el expresidente Jair Bolsonaro deberá comenzar a cumplir su condena de 27 años y tres meses de prisión por el intento de golpe de Estado ocurrido tras su derrota electoral en 2022. La decisión, considerada definitiva e inapelable, fue firmada por el juez Alexandre de Moraes, relator del caso conocido como la “conspiración golpista”.
Bolsonaro permanecerá recluido en la sede de la Policía Federal en Brasilia, donde ya se encontraba desde el sábado luego de que se ordenara su prisión preventiva. Según la investigación, el exmandatario habría intentado manipular su tobillera electrónica utilizando un soldador, hecho que él mismo reconoció y atribuyó a una “alucinación” y a episodios de “paranoia”.
Condenas y detenciones en la cúpula militar
Además de Bolsonaro, fueron arrestados exjerarcas militares que integraron su gobierno y que, según el STF, participaron en el intento de golpe. Entre ellos están los exministros Augusto Heleno (Seguridad Institucional), Paulo Sérgio Nogueira (Defensa), el excomandante de la Marina, Almier Garnier, y el exministro de Justicia Anderson Torres.
Otro de los condenados, el exministro Braga Netto —quien ya se encontraba en prisión preventiva desde diciembre de 2024 por interferir en el acuerdo de culpabilidad de su exayudante Mauro Cid— continuará detenido en un cuartel de Río de Janeiro.
El fallo también ordena que el Tribunal Superior Militar y la Procuraduría General de Justicia Militar analicen la posible pérdida de grado militar de Bolsonaro y de los generales involucrados.
Recursos agotados y pérdida de derechos políticos
La Corte concluyó que la defensa del expresidente dejó vencer los plazos para presentar nuevas solicitudes de aclaración, lo que habilitó al STF a declarar firme la sentencia. Moraes determinó que los recursos pendientes eran inadmisibles y certificó la condena.
Con este pronunciamiento, Bolsonaro y los demás condenados quedaron inhabilitados políticamente. No podrán votar, afiliarse a partidos ni desempeñar cargos que requieran capacidad electoral activa.
La defensa insiste en apelar
Pese a que el Supremo Tribunal Federal consideró agotadas todas las instancias de apelación, los abogados de Bolsonaro anunciaron que presentarán un nuevo recurso. Paulo Cunha Bueno, integrante del equipo defensor, calificó de “sorprendente” que el tribunal rechazara un recurso que —según afirmó— aún no había sido presentado.
Otros defensores, como Demóstenes Torres (abogado de Garnier) y Matheus Milanez (defensor de Heleno), sostienen que se trata de un “juicio excepcional”, denuncian “persecución” y reiteran que sus clientes son inocentes. Aseguran que buscarán la anulación de la sentencia por vía de una revisión penal.
Un fallo histórico
Con esta resolución, el STF cristaliza uno de los procesos judiciales más trascendentes de la historia reciente de Brasil, marcando un precedente sobre la responsabilidad penal de un expresidente y altos mandos militares acusados de atentar contra la institucionalidad democrática. La causa fue avalada por cuatro de los cinco jueces de la Primera Sala, con José Luiz Fux como único voto disidente.
La decisión se produce casi tres años después del intento de desconocer los resultados que dieron la victoria a Luiz Inácio Lula da Silva en las elecciones de 2022, episodio que mantuvo en tensión al país y abrió una larga investigación judicial que hoy llega a una etapa decisiva.