El meteorólogo José Serra confirmó que el fenómeno de La Niña llegará a Uruguay durante la segunda quincena de diciembre, extendiéndose a lo largo del verano 2026, y advirtió que, aunque se tratará de un evento débil, sus impactos serán significativos en varias áreas del país, especialmente en el sector agropecuario.
En diálogo con Montevideo Portal, Serra señaló que los modelos climáticos internacionales, incluido el monitoreo de la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos), coinciden en que La Niña se presentará con una intensidad baja. “Según la NOAA, nos está indicando y confirmando que La Niña será débil por el momento”, afirmó.
Déficit de lluvias y aumento del riesgo forestal
A pesar de su menor intensidad, Serra advirtió que el fenómeno provocará un marcado déficit de precipitaciones, especialmente en regiones donde la humedad del suelo ya se encuentra por debajo de los niveles normales. Si bien no se prevé una ausencia total de lluvias, la frecuencia y distribución serán insuficientes para compensar la demanda hídrica.
“Un incremento del riesgo forestal, porque los suelos no tienen un alto valor de humedad”, alertó el meteorólogo, en referencia al peligro de incendios forestales que suele aumentar en períodos secos y con altas temperaturas. En este escenario, consideró que el país debe prepararse para cumplir estrictamente con las medidas de prevención.
Impacto en el agro: posibles pérdidas importantes
Serra fue enfático al señalar que el sector agrícola-ganadero será uno de los más afectados. La combinación de pocas lluvias, temperaturas más elevadas y suelo sin recuperación total tras la última sequía —que duró más de dos años y fue catalogada como histórica— podría derivar en “grandes pérdidas”.
“Vamos a tener grandes pérdidas en el sector agrícola ganadero”, sostuvo el especialista, al tiempo que indicó que el país ya evidencia señales preocupantes, como la proliferación de cianobacterias en varios ecosistemas acuáticos, producto de las condiciones de calor y escasez de agua dulce.
Contexto climático complejo para el verano
Uruguay llega a este nuevo ciclo de La Niña con reservas hídricas debilitadas y un verano que, según los modelos, presentará variaciones en las temperaturas del aire y una disminución en las lluvias. Esto ocurre debido al enfriamiento anómalo del Pacífico ecuatorial, causado por vientos alisios más fuertes, lo que genera un efecto dominó en el clima regional y global.
Para Serra, el mensaje es claro: “Hay que prepararse”. Tanto productores como autoridades deberán reforzar sus planes de manejo del agua, prevención de incendios y monitoreo de suelos en un verano que, aunque bajo una Niña débil, podría tener consecuencias relevantes para la producción y el ambiente.

