Cerro Largo vivió un giro político histórico este domingo con la victoria de Christian Morel en las elecciones departamentales, en un resultado que selló el fin del liderazgo del senador Sergio Botana en su bastión político y dejó al descubierto una fractura dentro del Partido Nacional.
El exalcalde de Río Branco, líder de la lista 93, obtuvo 28.489 votos, superando al intendente José Yurramendi, candidato del oficialismo departamental, quien alcanzó 25.233 sufragios. De esta forma, Morel se impuso en una interna blanca caracterizada por tensiones, reproches cruzados y una inédita disputa abierta entre dos sectores nacionalistas.
Una campaña con fisuras internas
La elección no solo marcó el retorno del Partido Nacional al gobierno departamental —que ya ostentaba— sino también una reconfiguración interna. Christian Morel desoyó los pedidos del comando nacionalista para que bajara su candidatura y optó por una campaña con sello propio, distanciada del oficialismo y de la figura de Álvaro Delgado, a quien no apoyó activamente durante el balotaje presidencial.
Morel incluso fue acusado por sus adversarios internos de haber alentado el “voto cruzado”, apelando a simpatizantes del Frente Amplio para imponerse en la elección departamental. Esa estrategia, que generó resquemores en filas blancas, fue finalmente exitosa, consolidando un nuevo liderazgo político en el departamento.
Erosión del poder de Botana
La derrota de Yurramendi, respaldado directamente por el senador Sergio Botana, representa un duro golpe para el histórico líder nacionalista en Cerro Largo, quien dominó la política departamental durante más de una década. La gestión del actual intendente sufrió desgaste, especialmente tras decisiones como el recorte del 20% en los salarios de cargos de confianza y la disminución de la nómina de proveedores, medidas que generaron malestar en sectores económicos y políticos locales.
Además, la percepción de una gestión distante del estilo “clientelar” que caracterizó los gobiernos de Botana debilitó el respaldo interno al oficialismo.
Nueva etapa con promesas de eficiencia
En su primer mensaje como intendente electo, Morel aseguró que su gestión buscará mayor eficiencia sin recurrir a despidos. En un contexto de restricciones presupuestarias, prometió “ordenar la casa” y enfocarse en una administración equilibrada y austera.
El resultado de Cerro Largo se inscribe en un nuevo mapa político departamental tras las elecciones del domingo, donde el Partido Nacional mantuvo 14 intendencias a nivel nacional, pero sufrió una notoria fractura interna en su bastión más emblemático.
La victoria de Christian Morel no solo modifica el panorama local, sino que redefine las correlaciones de poder dentro del Partido Nacional, que deberá afrontar ahora un proceso de recomposición interna en Cerro Largo.