Como dice el dicho, “nadie es profeta en su tierra”, pero el grupo Latidos de Melo, encabezado por el artista Silvio Soldarán, demostró que el talento del norte también vibra con fuerza en la capital. La presentación realizada el sábado 15 de noviembre en “La Vaca Azul”, en Montevideo, convocó a un numeroso público y fue recibida con entusiasmo, aplausos y emoción.
El espectáculo, declarado de interés departamental, reunió música, teatro y expresión artística en un formato innovador que combina humor, identidad y reflexión social. En esta oportunidad, Silvio Soldarán presentó “Latidos de Melo” junto al músico Danilo Caballero, en una propuesta que rindió homenaje al arte popular y a la esencia de la cultura arachana.
Un puente cultural entre Melo y Montevideo
El evento —con entrada gratuita y organizado en el espacio cultural de Maldonado 1855— sirvió como punto de encuentro entre artistas del interior y el público capitalino.
Soldarán, fiel a su estilo, alternó entre monólogos teatrales, sátira costumbrista y canciones que recorren historias cotidianas del Uruguay profundo, generando una conexión inmediata con los asistentes.
El acompañamiento musical de Danilo Caballero y la participación de músicos invitados reforzaron el carácter coral de la propuesta, que busca poner en valor el trabajo creativo de los artistas del interior.
Declarado de interés departamental
La Intendencia de Cerro Largo declaró la actividad de interés departamental, en reconocimiento a su aporte a la difusión cultural y artística de la región. La obra, que combina elementos de teatro popular y música en vivo, refleja la identidad del noreste uruguayo y rescata el espíritu de comunidad que caracteriza a los melenses.
Aplausos y nuevos desafíos
El éxito en Montevideo consolida el proyecto Latidos de Melo como una propuesta artística con proyección nacional. El colectivo ya evalúa nuevas presentaciones en el interior y en escenarios culturales del país.
Entre risas, guitarras y poesía, Silvio Soldarán y su elenco demostraron que el arte arachán late fuerte, incluso lejos de casa, confirmando que, a veces, el talento del norte no solo conquista su tierra, sino también al público de todo el Uruguay.

