El Liceo N.º 4 de Melo celebró la inauguración oficial de su Nido Amigable, un espacio inclusivo diseñado y gestionado por alumnos del propio centro educativo, quienes impulsaron la iniciativa con el objetivo de crear un lugar seguro, accesible y amigable para toda la comunidad estudiantil.
El proyecto nació a partir de una propuesta presentada por un grupo de estudiantes al programa Nodo, donde resultaron seleccionados y financiados para concretar la idea. La nueva área fue acondicionada como un punto de encuentro, contención y convivencia, pensado para promover el bienestar emocional, la integración y el respeto entre pares.
Durante la inauguración, las alumnas Romina Pereira y Yulliet Echeveste, principales impulsoras del proyecto, destacaron la importancia de contar con un espacio que “acompañe, reciba y escuche”, especialmente en un contexto donde las problemáticas de convivencia y la salud emocional de los jóvenes ganan protagonismo. “Queríamos que todos tuvieran un lugar donde sentirse cómodos y contenidos”, expresaron.
Por su parte, Soledad La Gamma, referente de Ceibal, subrayó que este tipo de iniciativas “refleja el rol activo de los estudiantes en la transformación de sus propios centros educativos” y valoró la creatividad y compromiso del equipo del Liceo 4.
El director del liceo, Óscar Neves, celebró el logro y agradeció el esfuerzo colectivo. “Es un orgullo ver cómo nuestros alumnos detectan necesidades, proponen soluciones y las llevan adelante. El Nido Amigable es un aporte concreto para mejorar la convivencia y fortalecer el clima educativo”, afirmó.
La apertura del espacio marca un nuevo hito para el Liceo 4, que continúa consolidando proyectos centrados en la inclusión y el desarrollo integral de sus estudiantes. Según adelantaron las autoridades, el Nido Amigable servirá también como punto de referencia para futuras actividades de apoyo, talleres y encuentros de convivencia.

