La expedición científica Uruguay Sub200, que zarpó el pasado 22 de agosto con el objetivo de explorar los fondos marinos frente a la costa uruguaya, debió ser suspendida de manera temporal a raíz de un desperfecto en el buque Falkor (too), del Schmidt Ocean Institute.
Fallas en el buque de investigación
El problema se registró en la estructura conocida como A-frame, instalada en la popa de la embarcación y fundamental para el despliegue de equipos científicos como el vehículo submarino ROV SuBastian. Durante una maniobra, la pieza dejó de funcionar al intentar erguirse desde su posición de almacenamiento.
El propio equipo de investigación informó que se trató de un hecho inusual, “nunca antes ocurrido en este barco”, y aclaró que no hubo heridos entre los integrantes de la tripulación ni del grupo de científicos.
Regreso a puerto y perspectivas
El buque regresó al Puerto de Montevideo el lunes 25 de agosto en horas de la tarde, donde permanecerá hasta completar las reparaciones. Desde la Universidad de la República (Udelar) se comunicó que se trata de una “pausa” y que la expedición retomará sus actividades una vez solucionado el inconveniente técnico.
La investigación continuará desde la “Estación 3”, ubicada en una de las laderas del Cañón del Río de la Plata. La fecha de cierre de la misión, prevista para el 19 de septiembre, no se modificará, según informaron los responsables del proyecto.
Un proyecto histórico
La Uruguay Sub200 es la primera expedición oceanográfica de gran escala en aguas profundas nacionales. Reúne a 29 científicos de Uruguay y de otros países de la región y Europa, con el propósito de estudiar ecosistemas y formaciones geológicas a profundidades de entre 200 y 3.600 metros.
La misión, desarrollada con tecnología de punta y transmisiones en vivo, constituye un hito para la ciencia nacional y busca generar información clave sobre biodiversidad y recursos del margen continental uruguayo.